Delfines, tetas y porno, eso solo se mescla en fotos caseras donde lo único que importa es que una chica este desnuda haciendo guarradas. Por un lado tenemos una chica con un horrendo tatuaje, por el otro la misma chica con un cuerpo voluptuoso y cara zorra. En ese momento nuestra mente deja de funcionar para usar toda la sangre y oxigeno disponible en nuestro pene y todo lo demás nos saber a mierda. Solo vemos el cuerpo de esta mujer, y se ha confirmado que hasta podemos perder la habilidad de hablar, en algunos casos solo vuelve hasta que podamos corrernos. Eso no debería ser extraño a estas alturas, que todos sucumbimos antes un culo grande y tetas bien formadas, pero sobre todo ante un cogida gratis.
