Las chicas tienen un arma secreta que no todas conocen, es un poder de convencimiento justo en el medio de sus piernas. Para el ejemplo podemos ver a Bree Daniels en esta galería, donde usa una especie de armadura de metal que aunque luce bien a primera vista no tenemos idea de que se trata, no nos creemos la escenificación y no está ni cerca, pero rápido nos vemos cautivados por su belleza y es donde decimos: “ok, eres hermosa pero igual no me lo creo”. Y ya nos damos por listos creyendo que la estrategia era convencernos con su rostro cuando solo era una distracción táctica para que estemos confiados y no la veamos venir nunca, es entonces cuando nos enseña el lindo y rosado coño, en ese momento ya es tarde y hemos caído en sus garras.
